Al menos 10 personas murieron y 33 están desaparecidas debido a inundaciones repentinas en la provincia de Gansu, en el noroeste de China.
Lluvias torrenciales desbordaron ríos y provocaron deslizamientos de tierra en áreas montañosas cercanas a la ciudad de Lanzhou, dejando a más de 4,000 personas atrapadas en cuatro aldeas tras cortes de energía y telecomunicaciones.
En el pueblo de Maliantan, tres personas desaparecieron tras un deslizamiento de tierra.
Las precipitaciones alcanzaron hasta 195 milímetros en algunas zonas, y las autoridades han movilizado equipos de rescate para buscar a los desaparecidos y brindar asistencia a los afectados . El presidente chino, Xi Jinping, ha instado a intensificar los esfuerzos de rescate y prevención de inundaciones.
Este evento se suma a una serie de desastres naturales que han afectado a China en las últimas semanas. En julio, otro temporal de lluvias torrenciales en Beijing dejó al menos 44 muertos y causó evacuaciones y cortes de suministro eléctrico.