A pesar que la semana pasada se anunció que las autoridades reconsiderarían la aplicación del carril a contraflujo en la avenida López Mateos, durante el turno vespertino, por las complicaciones viales que genera a los vehículos que entran a la ciudad y no resuelve los embotellamientos que ocurren en las tardes en la salida, fuentes mencionan que se optó por mantener la estrategia.
También se había adelantado que el programa a contraflujo se lanzaría a la avenida Juan Gil Preciado, que particularmente por las tardes tiene problemas de embotellamientos, pero esto no fue llevado a cabo.
Por lo pronto, esta tarde volvió el operativo a contraflujo en López Mateos y volvió a presentarse un cuello de botella. La fila para los vehículos que trataban de ingresar a la ciudad alcanzó los ocho kilómetros de distancia, desde Santa Anita hasta Periférico.
