Este miércoles al menos siete personas (cuatro mujeres, una adolescente de 16 años y dos niñas de cinco años) fallecieron luego de que la embarcación en la que viajaban volcara con aproximadamente 150 a 180 migrantes a bordo en el puerto de La Restinga, en la isla de El Hierro, en las Islas Canarias.
El incidente ocurrió cuando la embarcación, escoltada por Salvamento Marítimo, se aproximaba al muelle. Durante las maniobras de desembarco, muchos ocupantes se desplazaron hacia un lado, lo que provocó su escoramiento y posterior vuelco, arrojando a los pasajeros al mar.
Dos menores, entre ellos un niño de tres años y una niña de cinco, fueron trasladados en estado grave por ahogamiento a hospitales en Tenerife. Otros cuatro menores presentaban síntomas de asfixia.
Las labores de rescate contaron con la participación de Salvamento Marítimo, Cruz Roja, Policía Nacional, Guardia Civil y voluntarios locales, incluyendo buzos de clubes de la zona. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, expresó su consternación por la tragedia y subrayó la necesidad de abordar esta crisis humanitaria.
Este suceso se suma a una serie de tragedias recientes en la ruta migratoria atlántica, resaltando las peligrosas condiciones en las que viajan estas embarcaciones.