Trump amenaza con aranceles a países que cobren impuestos digitales

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este 25 de Agosto que aplicará aranceles adicionales y restricciones en la exportación de tecnología y chips a aquellos países que no eliminen sus impuestos digitales, los cuales considera perjudiciales para las empresas tecnológicas estadounidenses

Según Trump, estas tasas no solo afectan a la economía estadounidense, sino que también benefician a las grandes compañías tecnológicas chinas, creando un trato injusto para las empresas de EE.UU.

En un mensaje publicado en su red social Truth Social, Trump se dirigió directamente a los países con "tasas, leyes o regulaciones digitales", enfatizando que si no eliminan estos impuestos, enfrentarán fuertes medidas comerciales por parte de Estados Unidos.

Hizo hincapié en que ya no permitirán que el país ni sus empresas líderes en tecnología, conocidas como las "Big Tech" -como Meta, Alphabet, Amazon, Microsoft y Apple- continúen siendo un recurso fácil o una "hucha" para otros países. Según él, estas firmas, que dominan a nivel global, merecen respeto y protección frente a políticas que las perjudican.

Esta no es la primera vez que Trump enfrenta este asunto. Desde su primer mandato, ha sido crítico con impuestos como el impuesto a los servicios digitales (DST, por sus siglas en inglés), utilizado por países como Canadá, Francia, Reino Unido, Italia y España

De hecho, en junio pasado, debido a la presión ejercida por la administración estadounidense, Canadá decidió finalmente desistir de implementar nuevas tasas para las grandes empresas tecnológicas de EE.UU.

En febrero, Trump firmó una orden ejecutiva que amenazaba con castigar a estas naciones y abrir investigaciones renovadas en contra de quienes mantienen estas políticas, reiterando así su postura firme frente a lo que considera una discriminación contra la tecnología estadounidense.

Para Trump, estas medidas no solo son un combate económico, sino una defensa de la soberanía comercial y tecnológica de Estados Unidos frente a lo que él califica como un trato injusto en la economía digital global.

Además, ha dejado claro que cualquier país que desea mantener un buen vínculo comercial y tecnológico con EE.UU. debe considerar las consecuencias de mantener estos impuestos, elevando la tensión comercial respecto a la regulación fiscal en el mercado digital internacional