En la búsqueda por perder peso de manera rápida, muchas personas recurren a dietas extremas que, lejos de beneficiar al organismo, pueden ocasionar graves daños a la salud física y mental. De acuerdo con especialistas en nutrición, existen al menos cinco tipos de dietas que son consideradas entre las más peligrosas debido a sus efectos negativos en el metabolismo, el estado nutricional y el equilibrio hormonal.
Entre las más riesgosas se encuentran:
La dieta del repollo: Consiste en consumir exclusivamente sopa de repollo durante varios días. Aunque puede generar una pérdida de peso rápida, esta dieta carece de los nutrientes esenciales para el funcionamiento adecuado del cuerpo, provocando desnutrición, fatiga extrema y pérdida de masa muscular.
La dieta cetogénica (keto): Aunque es popular entre quienes buscan bajar de peso rápidamente, la dieta keto implica una ingesta muy alta de grasas y muy baja en carbohidratos, lo que puede alterar el funcionamiento normal del metabolismo. A largo plazo, puede afectar la función hepática y renal, además de elevar el riesgo de trastornos cardiovasculares si no se lleva con supervisión médica adecuada.
Jugos détox: Basada en el consumo exclusivo de jugos de frutas y verduras, esta dieta promete "desintoxicar" el organismo. Sin embargo, no solo carece de fundamento científico, sino que elimina grupos completos de alimentos, lo que puede provocar desequilibrios nutricionales, hipoglucemia, debilidad y pérdida de masa muscular.
Ayuno intermitente sin supervisión: Aunque puede ofrecer beneficios si se aplica correctamente, el ayuno intermitente practicado sin orientación profesional puede llevar a trastornos alimentarios, alteraciones hormonales, desregulación del apetito y episodios de ansiedad o atracones.
Dieta "aire" o dieta sin calorías: Esta es una de las más extremas y peligrosas, pues promueve la idea de "alimentarse del aire" o limitarse a líquidos sin aporte calórico. Esta práctica puede desencadenar cuadros severos de desnutrición, anemia, debilidad generalizada e incluso poner en riesgo la vida.
En conjunto, estas dietas pueden generar alteraciones graves en el metabolismo, deficiencias nutricionales, anemia, y, en los casos más extremos, comprometer la salud de órganos vitales.
Las autoridades sanitarias y profesionales de la salud hacen un llamado a la población a no dejarse llevar por tendencias virales o métodos milagrosos, y en su lugar, buscar asesoría de expertos en nutrición para adoptar un plan alimenticio equilibrado, sostenible y acorde con las necesidades individuales.