Con 26 años de servicio como fotógrafo en la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora, Luis Escárrega es un ejemplo de compromiso tanto en el ámbito profesional como en su papel como padre.
Su lente ha capturado momentos claves en la historia de esta dependencia, sin embargo, más allá de su papel como servidor público, Luis asume con total entrega un rol aún más desafiante: el de ser papá soltero.
En su vida personal, su atención está centrada en el cuidado y bienestar de su hijo Emiliano, quien vive con autismo. Esta condición ha transformado su manera de ver el mundo, y lo ha llevado a desarrollar una sensibilidad especial que también se refleja en su trabajo fotográfico.
Luis ha aprendido a equilibrar jornadas complejas con las necesidades particulares de su hijo, construyendo una rutina marcada por el amor, la paciencia y la dedicación.
Ser padre de un niño con autismo implica retos constantes: desde la comunicación hasta el acompañamiento terapéutico y educativo.
Luis ha enfrentado estos retos con una entereza admirable, convirtiéndose no solo en cuidador, sino también en guía, maestro y principal apoyo emocional para su hijo.
Su testimonio inspira a otros padres que atraviesan situaciones similares, demostrando que es posible criar con amor y firmeza incluso en contextos difíciles.