El Caucus Hispano del Congreso (CHC) y la Federación Hispana lanzaron este lunes una campaña conjunta para exigir al gobierno de Donald Trump mayor transparencia y rendición de cuentas por las políticas migratorias que, aseguran, han derivado en detenciones y deportaciones masivas en todo Estados Unidos
La iniciativa busca restablecer la supervisión del Congreso sobre la aplicación de las leyes migratorias y reformar al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), la agencia responsable de las redadas.
Según el comunicado de ambas organizaciones, la meta es garantizar que las acciones del ICE respeten el debido proceso legal y los derechos humanos.
Entre las propuestas de la coalición destacan la revisión de los protocolos policiales federales, un mejor equilibrio entre seguridad pública y derechos civiles, y el uso transparente de recursos públicos.

También se pide canalizar más fondos hacia metas humanitarias, en lugar de destinarlos únicamente a detenciones o deportaciones
Aumento de redadas y presencia militar
La campaña surge en un contexto de endurecimiento de las políticas migratorias, con redadas simultáneas en distintas ciudades y el despliegue de la Guardia Nacional para proteger a agentes migratorios durante los operativos.
Ciudades como Los Ángeles, Washington y Memphis han reportado presencia militar en zonas urbanas donde viven comunidades de migrantes.

Activistas y legisladores demócratas han denunciado el uso excesivo de la fuerza y la falta de identificación de los agentes, quienes -según testimonios- realizan arrestos cubiertos con máscaras y sin mostrar su número de placa
"Una guerra urbana"
El congresista Adriano Espaillat, presidente del CHC, calificó las operaciones del ICE como "una guerra urbana" y criticó la falta de control sobre los agentes federales.
A su juicio, las acciones del gobierno han generado miedo generalizado y debilitado la confianza entre las comunidades migrantes y las autoridades locales.

La organización Voto Latino también se sumó a la campaña, señalando que las políticas del gobierno "han empujado a las familias inmigrantes a la clandestinidad" y afectado la seguridad pública
Más fondos, menos supervisión
El llamado ocurre apenas cuatro meses después de que el Congreso aprobara 170 mil millones de dólares adicionales para reforzar las operaciones del ICE, una medida que, según los impulsores de la campaña, aumentó el poder operativo de la agencia sin mejorar los mecanismos de vigilancia y control.
El comunicado también acusa al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) -del cual depende el ICE- de extralimitarse en sus funciones y operar con "escasa o nula supervisión".

Con esta campaña, las organizaciones buscan presionar políticamente al Congreso para retomar su papel de contrapeso y garantizar que la aplicación de la ley migratoria no se traduzca en abusos ni en la criminalización de comunidades enteras.