El transporte urbano en Sinaloa enfrenta una de sus peores crisis económicas en años, alertó la Federación de Autotransportes del Estado, al señalar que la baja en la demanda del servicio ha sido especialmente severa en las últimas semanas de julio, periodo considerado como el más crítico del año para el sector.
Factores como el receso escolar, la disminución de actividades gubernamentales y la baja movilidad social han provocado una fuerte caída en el flujo de pasajeros.
A esto se suma el hecho de que las tarifas no han sido actualizadas en los últimos tres años, lo que ha afectado seriamente la capacidad operativa y financiera de los concesionarios.
La organización transportista advirtió que el sector ya no puede sostenerse sin apoyo, pues los ingresos actuales no cubren siquiera los gastos de mantenimiento de las unidades. Además, señalaron que el problema se ha agravado con la inseguridad, la falta de subsidios y los efectos de la sequía en otras áreas económicas del estado
Ante este panorama, el gremio pidió al Gobierno del Estado establecer mesas de diálogo para buscar soluciones de corto y mediano plazo. Insisten en que se requiere una intervención inmediata para evitar un colapso en el servicio que afectaría tanto a los trabajadores como a los usuarios.