Cada 11 de febrero se conmemora el Día Mundial de la Mujer Médica, en honor a Elizabeth Blackwell, la primera mujer en obtener un título en medicina en Estados Unidos. Su logro marcó el inicio de un camino de lucha y reconocimiento para las mujeres en el ámbito médico.
Históricamente, la medicina ha sido un campo dominado por hombres. Sin embargo, en las últimas décadas, la presencia femenina ha aumentado significativamente. Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del segundo trimestre de 2021, el 46% de los médicos en México son mujeres. Además, en la mayoría de las escuelas de medicina del país, el 60% del alumnado está conformado por mujeres, lo que refleja una transformación en la profesión.
Las mujeres médicas se desempeñan en diversas áreas: atención clínica, investigación, docencia y gestión hospitalaria. A pesar del avance, aún enfrentan retos como la brecha salarial, la falta de oportunidades en cargos directivos y el equilibrio entre la vida profesional y personal.
Este día busca reconocer la labor de las médicas en todo el mundo y motivar a nuevas generaciones a ingresar al campo de la salud. La equidad de género en la medicina no solo es un tema de justicia, sino también una necesidad para fortalecer los sistemas de salud con una visión más incluyente y diversa.
El crecimiento de la presencia femenina en la medicina es un paso importante, pero aún queda trabajo por hacer para garantizar igualdad de oportunidades y condiciones laborales.