La prolongada sequía que afecta al estado de Durango ha generado una crisis hídrica en los centros ecoturísticos de la zona de Otinapa, obligando a los empresarios del sector a contratar servicios de pipas para abastecerse de agua.
Rafael Sarmiento Aguirre, empresario de ecoturismo en la región, señaló que la escasez de agua ha persistido, y que incluso han tenido que contratar pipas para algunos centros en Otinapa, especialmente ahora que ha aumentado la ocupación.
El costo de una pipa de 10,000 litros ronda los $5,000 pesos, y se requiere al menos una cada dos o tres días para mantener las operaciones básicas.
La situación se agrava debido a que el agua debe ser transportada desde la capital de Durango hasta los centros ecoturísticos, lo que incrementa los costos y complica la logística.
A pesar de estos desafíos, Sarmiento Aguirre destacó que el suministro de energía eléctrica se ha mantenido estable, lo cual es un alivio para el sector.
Las autoridades locales han reconocido la problemática y han implementado programas de atención para mitigar los efectos de la sequía en las comunidades afectadas.
Se espera que, con la colaboración entre el gobierno y los empresarios, se puedan encontrar soluciones sostenibles para garantizar el suministro de agua en la región y preservar la actividad ecoturística que es vital para la economía local.