Equinoterapia donde galopa la nueva vida
Por:
Gerardo Salazar
Durango
Fecha: 24-07-2025
Durango
Fecha: 24-07-2025
Mía, una niña de tan solo 4 años, nació con parálisis cerebral. Desde entonces, no ha podido caminar ni hablar con claridad. Su cuerpo rígido y sus movimientos limitados la alejaron del desarrollo típico de otros niños. Sus padres buscaron respuestas en hospitales y centros de atención, pero la mayoría ofrecía listas de espera o diagnósticos sin respuesta. Como último recurso, llegaron a la equinoterapia.
La equinoterapia es una técnica que combina rehabilitación física, emocional y cognitiva mediante la interacción con caballos. Ayuda a mejorar el equilibrio, la coordinación, el lenguaje y la autoestima en niños con parálisis cerebral, autismo, TDAH, síndrome de Down y otras discapacidades.
El movimiento del caballo estimula el sistema nervioso central, imita el patrón natural de la marcha humana y mejora el tono muscular, el equilibrio y la coordinación. La equinoterapia también fortalece la autoestima y la conexión emocional, clave en niños con espectro autista o dificultades sociales.
Las cifras en Durango revelan una necesidad creciente: cada año nacen entre 30 y 40 niños con parálisis cerebral, mientras que el síndrome de Down aparece en al menos 20 a 60 casos anuales. En cuanto al trastorno del espectro autista (TEA), asociaciones civiles reportan más de 400 casos diagnosticados, y otros tantos están en lista de espera en centros como el CRIT. El TDAH, aunque sin cifras estatales públicas, podría afectar entre el 5% y 7% de la población infantil en edad escolar.
La equinoterapia no es solo una técnica alternativa; es una oportunidad de reconectar el cuerpo con la esperanza. En cada sesión, los niños no solo aprenden a equilibrarse sobre un caballo, también recuperan partes de sí mismos que la enfermedad parecía haber apagado. El trote suave, el calor del animal, la confianza que se genera? todo construye algo más grande que la terapia: una vida digna, plena y más libre.
