El Colegio de Médicos Veterinarios Zootecnistas de Durango hizo un llamado enérgico a frenar las agresiones contra el gremio, luego de que se registrara un incidente en el que médicos veterinarios fueron agredidos físicamente durante el ejercicio de su labor. Aunque los presuntos responsables fueron detenidos, posteriormente fueron liberados tras pagar una fianza, lo que ha generado inconformidad y tristeza entre los afectados.
Saúl Sandoval Fierro, presidente del Colegio, señaló que los médicos agredidos se encuentran estables y que, afortunadamente, el hecho no pasó a mayores gracias a la rápida actuación de las autoridades. Sin embargo, expresó preocupación por la frecuencia con la que ocurren este tipo de incidentes, muchas veces no denunciados por temor.
"Lamentablemente estas agresiones suceden, aunque aparentemente no se vean. Pedimos un alto. Es importante que los médicos documenten todos sus procedimientos, con grabaciones, con evidencia, para evitar malentendidos y poder actuar conforme a la ley en caso de conflictos", declaró Sandoval Fierro.
El presidente del Colegio también hizo un llamado a los profesionales del ramo para fortalecer su unidad. "Cada médico ha estado actuando de manera individual. Estamos solicitando que nos unamos más, y establezcamos protocolos de actuación ante estas situaciones", indicó.
Por su parte, el equipo médico de la clínica veterinaria NaVet expresó su tristeza y frustración ante la decisión de la Fiscalía del Estado de Durango de dejar en libertad a los agresores, a pesar de que ?según relataron? las amenazas continuaron incluso frente a elementos de la Policía Estatal. Denunciaron que, pese a haber alertado a la autoridad correspondiente, la Fiscalía hizo caso omiso.
"Nos duele profundamente esta resolución, pero no nos queda más que acatarnos a las leyes. Seguimos firmes en nuestra vocación, pero pedimos justicia y protección para poder ejercer nuestra profesión sin miedo", expresaron en entrevista.
El Colegio reiteró su llamado a las autoridades y al público en general a respetar la labor médica veterinaria y reconocer que el trato con animales, al ser seres vivos, implica riesgos y requiere de preparación, empatía y respaldo institucional.