Ambientalistas y pobladores de la sierra de Atoyac han lanzado un enérgico llamado a las autoridades para reforzar las acciones de protección al jaguar, especie emblemática y en peligro de extinción en la región de la Costa Grande de Guerrero.
Habitantes de comunidades como Santo Domingo, Puerto de la Cuesta, El Carrizo y Corrales del Río Chiquito, ubicadas a lo largo del río del Bálsamo, advirtieron que continúan registrándose muertes de estos felinos pese a los estudios y esfuerzos realizados en años recientes para su conservación.
Aunque en tramos carreteros de la sierra existen señalamientos que prohíben su caza, la preocupación persiste entre los habitantes, especialmente por los ataques esporádicos al ganado que, impulsados por el instinto natural del jaguar, han generado temor entre ganaderos locales y podrían alentar la caza ilegal.
Los activistas solicitaron a los gobiernos estatal y municipal que intensifiquen las campañas de concientización y educación ambiental para fomentar la convivencia responsable con esta especie, vital para el equilibrio ecológico de la zona.