Alumnos y profesores del Centro de Estudios Tecnológicos del Mar (Cetmar) número 34, a través de los medios de comunicación, redes sociales, incluso con manifestaciones han solicitado sin éxito a las autoridades la pavimentación del camino que conduce al plantel, porque diariamente se vuelve una odisea para la comunidad estudiantil y docente llegar o salir de la institución.
Recientemente, un alumno a través de redes, hizo público un vídeo donde un automóvil pequeño hace varias maniobras para poder subir el camino despedazado de terracería y aunque al final de la grabación el coche logre subir, los daños a los vehículos son irreversibles.
Sin embargo, el problema viene de años atrás, el cual empeora precisamente en la temporada de lluvias; en un recuento basado en los archivos de este medio de comunicación: el pasado 22 de marzo del 2018 con una manifestación expusieron la problemática al gobernador del Estado, Héctor Astudillo Flores en una de sus giras por Zihuatanejo.
A partir, de ese momento, el director del Cetmar 34, Emigdio Radames Ramírez Méndez no ha quitado el dedo del renglón en la gestión, incluso en una declaración a este medio dijo que a través del titular de la Comisión de Infraestructura Carretera y Aeroportuaria del Estado de Guerrero (Cicaeg), Javier Taja Ramírez, se hablaba de un proyecto de pavimentación con recurso excedente de alguna obra, pero hasta el momento nada ha sucedido.
Tan solo durante el 2018, en junio tuvieron que buscar una sede alterna para impartir clases, en los meses de agosto y octubre, suspendieron clases durante varios días porque las fuertes lluvias dejaron el camino completamente destrozado y fue el 24 de octubre del mismo año, que la administración municipal actual, rehabilitó el camino pero no se anunció una pavimentación como tal.
Ahora en mayo del 2019, en pleno inicio de la temporada de lluvias, el director Emigdio Radames, hace un recordatorio a las autoridades del problema diario de los estudiantes y docentes, que para poder llegar a la escuela tienen que vivir una odisea, pues sus coches se dañan y las personas siempre se llenan de polvo, por ello es que esperó que el gobierno municipal o del Estado, tomen cartas en el asunto.