La inseguridad jurídica en torno a la propiedad de la tierra se ha convertido en un terreno fértil para la proliferación de invasiones en Baja California Sur, advirtió el abogado litigante Arturo Rubio Ruiz, quien subrayó que el verdadero conflicto no radica en deudas por terrenos, sino en la falta de certeza sobre la titularidad de los predios.
Rubio Ruiz explicó que, de acuerdo con el Código Penal, cuando una persona ocupa un inmueble ajeno sin tener derecho, comete el delito de despojo; sin embargo, cuando la ocupación se realiza de forma colectiva se configura como una invasión, un fenómeno que, aseguró, es una problemática real a nivel nacional, con particular gravedad en Baja California Sur.
El especialista detalló que muchas comunidades irregulares están integradas por personas que llegan a la entidad engañadas o en busca de empleo, como albañiles o prestadores de servicios, y que, al ver terrenos aparentemente disponibles, intentan establecerse sin conocer que están incurriendo en un acto ilegal.
Rubio destacó que esta situación se agrava porque la ley actual es "muy blanda", pues el delito de despojo se persigue por querella, y no se considera de prisión preventiva durante el procedimiento. "El otro tema que tenemos es que aparte la ley es muy blanda, porque te voy a decir que actualmente como es un delito que se persigue de querella, no es un delito que pudiera considerar que amerita prisión preventiva durante el procedimiento", precisó.
Finalmente, hizo un llamado a atender esta problemática desde una perspectiva jurídica y de planeación territorial, para garantizar la seguridad en la tenencia de la tierra y evitar que el desorden urbano siga creciendo. "Es fundamental establecer medidas que frenen la ocupación ilegal y den certeza tanto a propietarios como a quienes buscan asentarse de forma legítima", concluyó.