Baja California Sur enfrenta una de las sequías más severas del siglo XXI, con el 100% de su territorio afectado en distintos niveles. De acuerdo con reportes oficiales, el 60% del estado presenta sequía moderada, mientras que el 40% se encuentra en condición de "anormalmente seco". Esta crisis ha impactado especialmente a los ganaderos, quienes reportan una disminución del 30% en su hato durante los últimos dos años debido a la escasez de agua y alimento.
Ante esta situación, el gobernador Víctor Castro Cosío había anunciado un apoyo extraordinario de 10 millones de pesos para el sector, con la intención de distribuirlo entre las asociaciones ganaderas como fondo revolvente o para la compra de forraje en Sinaloa.
*"Ahorita estamos calculando de manera extraordinaria 10 millones de pesos para distribuirlos en las asociaciones ganaderas como fondo revolvente o compra directa donde hay más forraje en Sinaloa"*, declaró el mandatario en su momento.
Sin embargo, durante una reciente reunión con representantes del sector, el apoyo se redujo a solo 2 millones de pesos, lo que equivale a apenas 60 mil pesos por cada una de las 30 asociaciones ganaderas del estado.
Rubén Trasviña, presidente de la Asociación Ganadera de Los Barriles, expresó su descontento y la incertidumbre que esta reducción ha generado entre los productores.
"Por todos lados traíamos una alegría o una tranquilidad de que íbamos a recibir apoyo. Desgraciadamente, no sé si fue un malentendido, pero son realmente 2 millones de pesos nada más, lo que significa un promedio de 60 mil pesos por asociación ganadera. Hasta el día de hoy no se sabe ni cómo ni bajo qué reglas se va a distribuir esa cantidad", señaló.
A pesar del descontento, los ganaderos destacaron un punto positivo en la reunión: la solicitud de la Unión Ganadera Regional para que el gobernador gestione la declaratoria de sequía emergente en Baja California Sur. La petición fue respaldada por Castro Cosío ante representantes del Consejo Nacional Agropecuario, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y Protección Civil.
Mientras tanto, los productores siguen a la espera de medidas concretas que les permitan enfrentar la crisis hídrica que amenaza la actividad ganadera en el estado.