El superintendente de la Terminal de Abasto y Distribución de PEMEX en La Paz, Miguel Armando Ilizarrituri Kuri Noriega, informó que desde 2017 la paraestatal enfrenta serios problemas de infraestructura hidráulica, lo que compromete su capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia.
Durante la sesión del Consejo Estatal de Protección Civil, el representante de Petróleos Mexicanos en la entidad solicitó la intervención del gobernador Víctor Castro Cosío y de la alcaldesa de La Paz, Milena Quiroga Romero, para atender una problemática que, aunque ha sido planteada en reiteradas ocasiones, no ha recibido solución. Señaló que la construcción del campo de golf en Costa Baja ocasionó el colapso de la tubería que suministraba agua a las instalaciones de Pemex.
Detalló que esta situación es de atención urgente, ya que actualmente el tanque contra incendios de Pemex opera apenas al 50% de su capacidad. El suministro de agua depende únicamente de una pipa y una cisterna con capacidad para 200 metros cúbicos, de los cuales sólo se dispone de 60 metros cúbicos, lo que reduce considerablemente la posibilidad de hacer frente a cualquier contingencia.
"Actualmente, nuestra capacidad de emergencia está muy limitada, tenemos el tanque contra incendios de agua para el servicio al 50%, sí tenemos suministro de agua pero es con pipas, tenemos un autotanque para el suministro y no puedo suministrar todos los días porque tiene que ser un operador específico el que conduzca ese vehículo, porque si lo conduce cualquier persona es motivo de infracción".
Aunque reconoció que desde 2018 los pozos han mantenido un suministro constante, aclaró que el volumen disponible continúa siendo insuficiente para responder eficazmente ante emergencias de gran escala.