Durante agosto de 2025, los hogares mexicanos aumentaron ligeramente su gasto
Según el Indicador Mensual del Consumo Privado (IMCP) del INEGI, el consumo total creció 0.6 % respecto a julio, lo que sugiere que las familias están recuperando poco a poco su poder de compra tras varios meses de altibajos.
En comparación con el año pasado, el aumento fue de 0.9 %.
Este indicador mide cuánto gastan las personas en bienes y servicios -desde alimentos y ropa hasta transporte o entretenimiento-, tanto de origen nacional como importado.

En otras palabras, ayuda a entender cómo se mueve la economía del día a día: lo que la gente compra, usa y consume.
Lo hecho en México impulsa el gasto
El mayor impulso provino del consumo de bienes y servicios nacionales, que creció 0.8 % en el mes.
Dentro de este grupo, el gasto en bienes -por ejemplo, alimentos, productos de limpieza o ropa fabricada en México- subió 1.3%, mientras que el gasto en servicios, como transporte público, peluquerías o consultas médicas, aumentó apenas 0.2%.
En cambio, el consumo de bienes importados -como electrónicos, automóviles o ropa de marca extranjera- avanzó 0.3%.

A tasa anual, el aumento en productos del exterior fue mayor, de 4.4 %, reflejando que algunos consumidores están aprovechando precios más competitivos o la apreciación del peso para comprar artículos extranjeros
Más gasto en lo básico, menos en lo duradero
Los datos muestran que las familias mexicanas siguen priorizando lo esencial.
Los bienes no duraderos, como alimentos, productos de limpieza o gasolina, crecieron 0.8%, mientras que los bienes duraderos, como refrigeradores, autos o muebles, bajaron 5.3%.
Esto sugiere que muchos hogares aún no sienten la estabilidad suficiente para hacer compras grandes. En cambio, se concentran en lo necesario para el día a día.

Por ejemplo, una familia puede mantener su gasto en la despensa, pero aplazar la compra de una televisión nueva o el cambio de coche
El consumo como reflejo del ánimo económico
El consumo privado es uno de los motores principales de la economía mexicana: cuando las familias gastan más, las empresas producen y venden más.
Aunque el incremento de agosto fue moderado, refleja una ligera mejora en la confianza de los consumidores, impulsada por la estabilidad del empleo formal y una inflación más controlada.

En palabras simples, el bolsillo mexicano se mueve, pero aún con cautela