La presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que las iniciativas de reformas legales relacionadas con los procesos judiciales, especialmente la que modifica la ley de Amparo, tienen como propósito principal hacer que la justicia sea más rápida y efectiva, evitando que los casos permanezcan años sin resolverse
Durante su conferencia de prensa, Sheinbaum explicó que estas reformas buscan acotar los alcances de la figura del amparo, ya que actualmente permite que, incluso después de una sentencia firme de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, una persona pueda volver a solicitar un amparo contra la ejecución de la resolución.
La intención, señaló, es reducir este tipo de retrasos legales y garantizar que las sentencias se cumplan de manera más eficiente.
Reducción de tiempos y personas en prisión
La presidenta subrayó que el objetivo central es acortar los tiempos de los procesos judiciales, de modo que no haya personas permaneciendo años en prisión sin una sentencia definitiva.
La iniciativa busca un equilibrio entre la rapidez de los juicios y la protección de los derechos de los ciudadanos, evitando que los recursos legales se utilicen para demorar injustamente la administración de justicia.
Sheinbaum destacó que, pese a los cambios propuestos, se mantiene la defensa de los derechos del ciudadano frente a cualquier acto de autoridad.
La reforma no pretende eliminar las garantías, sino que los recursos judiciales se resuelvan de manera más expedita, protegiendo los derechos de quienes enfrentan procesos legales y asegurando que las sentencias se ejecuten con mayor prontitud, de acuerdo a lo informado por la mandataria.
Con estas reformas, el gobierno federal busca modernizar y agilizar el sistema judicial mexicano, asegurando que la justicia no se vea obstaculizada por retrasos legales prolongados y que las sentencias tengan un cumplimiento efectivo, sin poner en riesgo los derechos fundamentales de la ciudadanía