El Gobierno federal aumentará el IEPS a bebidas azucaradas y tabaco para reducir su consumo y fortalecer el sistema de salud. El impuesto a los refrescos subirá 87 % en 2026. Estudios indican que un alza del 10 % en precios puede disminuir el consumo en hasta 12 %. Ante el elevado consumo de bebidas saborizadas y el persistente problema del tabaquismo, el Gobierno federal ha puesto en marcha una reforma fiscal que eleva de forma significativa el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para estos productos con doble objetivo: "desincentivar" hábitos poco saludables y generar recursos para el sistema de salud. Para las bebidas con azúcar, el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios pasará de 1.6451 pesos/litro a 3.0818 pesos/litro a partir de 2026, lo que representa un alza de aproximadamente 87 %. Para las versiones ?light? o "cero calorías" endulzadas con edulcorantes no calóricos, se aprobó una tasa diferenciada: 1.50 pesos/litro en lugar de la tasa completa de 3.08 pesos. David Kershenobich, Ministro de Salud, declaró que el mexicano promedio consume 166L/a, lo que convierte a México en uno de los mayores consumidores de bebidas azucaradas en todo el mundo. Destacó que siete de cada 10 niños y adolescentes beben refrescos diariamente, incluso durante el desayuno, lo que lleva al 40% de ellos a tener sobrepeso u obesidad. Estudios previos en México indican que un aumento de precio de aproximadamente 10 % en bebidas azucaradas puede reducir el consumo de esas bebidas en alrededor de 12 % en algunos grupos, los mismo pasaría con los cigarros.