Las desapariciones de niñas, niños y adolescentes prenden las alertas en México, porque cada 24 horas desaparecen cuatro menores de edad, la corrupción y la impunidad son factores para que solo un caso sea resuelto por la autoridad, de acuerdo con Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim)..
Nuestro país enfrenta una grave crisis de los derechos humanos y los más afectados son los niños. Las primeras horas después de la desaparición son cruciales.
En este tema tan grave, lo que más preocupa es el destino de los menores sustraídos, porque muchos son víctimas de tráfico con fines de explotación sexual, incluida la pornografía infantil; y laboral, con su vertiente de mendicidad. También existe la sospecha de que algunos de ellos son ofertados en el mercado negro de órganos humanos, ampliamente impune.
El problema es que la autoridad no cuenta con una estadística al respecto. Peor aún, tampoco parece contar con investigaciones serias que conduzcan al desmantelamiento de estas redes criminales.
Cuando hablamos de desaparición hay muchos obstáculos por las horas que tardan las autoridades en buscar al menor. México es un país peligroso, en América Latina, México ocupa los primeros lugares en cifras de niños robados.
El Estado de México, Hidalgo y Tlaxcala encabezan la lista con más número de casos. Muchas veces el crimen lo comete alguien muy cercano a la familia.