Jaime es un pequeño de 11 años, trabaja al interior del Mercado Municipal de Navojoa con la venta de dulces y palomitas, lo realiza para aportar en la economía de su hogar.
Bajo la supervisión de sus padres él combina trabajo y escuela, lo realiza después de clases.
"Bien, se siente padre trabajar, yo me siento feliz", externó el pequeño.
En pleno día del niño, es una manera de sentirse autosuficiente, tomando lo positivo de emplearse mientras se educa, pero lamentablemente no todos los casos son iguales.L
Tan solo en Navojoa, la Subprocuraduría del Menor tiene visualizado a 40 infantes en omisión de cuidados, de ellos por lo menos el 20% trabajando en las calles sin supervisión. Exponen diariamente su vida sin la vigilancia que se requiere.
En Sonora, la última Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI), señaló que el 9.9 por ciento de la población infantil en Sonora se ve en la necesidad de trabajar, la mayor parte dejando a un lado su educación.
Desgraciadamente muchos padres de familia aportan a que esto suceda, le estamos dando seguimiento para evitar que esto suceda, hay caso muy lamentables", agregó la presidenta de DIF Navojoa, Luz Argel Gaxiola.
Según especialistas, el trabajo a corta edad y en horas prolongadas también provoca consecuencias físicas y emocionales en los menores. Afectaciones como la inasistencia escolar, riesgos para su desarrollo, además de su acercamiento a círculos viciosos.
Datos de la Fundación Nueva Generación en Sonora, revelan que más de 68 mil infantes en Sonora se encuentran en situación de trabajo infantil.
Hasta 2020, Navojoa contaba con 30 mil 585 menores de 12 años, con el 49% de niñas y el 51% niños, de una población mayor a los 170 mil habitantes. En los cinco albergues que tiene Navojoa, se encuentran en resguardo infantes detectados en situación vulnerable, asociados al trabajo infantil.