Durante las vacaciones escolares, el tiempo libre y el acceso sin supervisión al internet se combinan en un escenario que puede resultar letal: los retos virales o "challenges". Estos desafíos, difundidos principalmente en plataformas como TikTok, YouTube o Instagram, suelen ser presentados como entretenimiento o pruebas de valentía, pero en muchos casos han provocado lesiones graves e incluso la muerte de menores en diversas partes del mundo.
Algunos de estos retos consisten en:
Para muchos niños y adolescentes, la necesidad de aceptación social, sumada al deseo de "volverse virales", los impulsa a participar sin medir consecuencias.
Expertos en salud mental advierten que los menores aún no tienen la madurez suficiente para identificar riesgos reales en entornos digitales, por lo que es vital que los padres y cuidadores mantengan una comunicación abierta y activa con ellos. Además, es fundamental monitorear el uso de redes sociales, activar controles parentales y promover alternativas de entretenimiento seguras