La mañana de este miércoles 29 de octubre, la Presidenta Claudia Sheinbaum abordó el tema del cierre de carreteras por agricultores de maíz que exigían apoyos, durante la conferencia de prensa "La Mañanera del Pueblo".
La mandataria destacó que los recursos se deben entregar de manera directa a los productores y no a través de organizaciones intermediarias, como ocurría antes de la administración de Andrés Manuel López Obrador.
"Los apoyos se deben recibir de manera directa, no a través de organizaciones", enfatizó Sheinbaum, señalando que en administraciones anteriores se desconocía si los recursos llegaban a los productores. Además, subrayó que siempre se apoyará a los pequeños agricultores y a todo lo que represente la soberanía y autosuficiencia alimentaria del país.
El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), Julio Berdegué, informó que alrededor de las 2:00 de la madrugada de este miércoles se alcanzó un acuerdo con los líderes de los productores de maíz de Jalisco, Guanajuato y Michoacán, con el objetivo de atender las demandas y evitar conflictos en las carreteras.

Entre los principales motivos de la protesta está la caída del precio internacional del maíz, la cual ha impactado a los productores nacionales. Berdegué explicó que en lo que va del año el precio internacional del maíz ha bajado aproximadamente 21% en pesos, lo que genera presión sobre los ingresos de los agricultores mexicanos.
Como parte de los acuerdos, los gobiernos estatales y federal otorgarán un apoyo de 950 pesos por tonelada de maíz a los productores del Bajío. Además, la Presidenta instruyó ampliar el programa Cosechando Soberanía, que ahora beneficiará también a los agricultores de maíz mediante créditos y seguros agropecuarios, con tasa de interés de 8.5% anual y cobertura asegurada para todos los acreditados.
Otro de los compromisos es la creación del Sistema Mexicano de Ordenamiento de Mercado y Comercialización del Maíz, que permitirá establecer precios de referencia previos a la siembra, fomentar acuerdos directos de comercialización y garantizar reglas claras y públicas dentro de un marco jurídico.
Entre los acuerdos complementarios se incluye la publicación de las mecánicas operativas de los apoyos del gobierno federal y estatal, la apertura de una mesa de diálogo entre productores y compradores para analizar condiciones de comercialización, dar prioridad a la compra de la cosecha nacional y permitir que los representantes de los productores hagan observaciones sobre las reglas de los apoyos.
Con estos acuerdos, el Gobierno federal busca garantizar precios justos, apoyo directo a los agricultores y estabilidad en la producción de maíz, asegurando que los beneficios lleguen de manera efectiva a quienes trabajan en el campo.