Los Gobierno de China y Estados Unidos acordaron suspender, a partir del lunes, las tasas portuarias que ambos países habían impuesto en octubre, en el marco de la más reciente crisis comercial previa a los acuerdos firmados a finales de ese mes por los presidentes Xi Jinping y Donald Trump.
El Ministerio de Comercio de China confirmó que los gravámenes quedarán sin efecto durante un año, luego de que Washington suspendiera este 10 de noviembre sus investigaciones contra los sectores marítimo, logístico y de astilleros del país asiático.
Las llamadas "tasas portuarias especiales" fueron introducidas el 10 de octubre por el Ministerio chino de Transporte, en respuesta a medidas similares impuestas por Estados Unidos en abril. Ambas entraron en vigor el 14 de octubre, afectando a barcos de propiedad, operación o bandera estadounidense y a los construidos o gestionados por empresas con al menos 25% de capital norteamericano.
Hasta ahora, los buques chinos que llegaban a puertos estadounidenses pagaban 50 dólares por tonelada neta, tarifa que aumentaría cada año hasta 2028. Por su parte, los navíos estadounidenses que atracaban en puertos chinos debían pagar 56 dólares por tonelada, con incrementos progresivos hasta alcanzar los 157 dólares en el mismo periodo.
Expertos y representantes del sector marítimo habían advertido que estas medidas elevarían los costos operativos, modificarían rutas y reducirían volúmenes de carga, en un contexto ya afectado por el alza del combustible y la debilidad del comercio global.
De acuerdo con cálculos de la consultora Alphaliner, de haberse mantenido las tasas, las diez mayores navieras habrían desembolsado hasta 3,200 millones de dólares en 2026, de los cuales la estatal china Cosco habría absorbido cerca de 1,530 millones.
Además de la suspensión de los cobros portuarios, ambos países acordaron reducir algunos aranceles, retirar restricciones a ciertas exportaciones ?como las tierras raras chinas? y reactivar el comercio agrícola, en un nuevo intento por estabilizar la relación económica entre las dos mayores potencias del mundo.