Reabren gimnasios con estrictos protocolos de higiene y prevención

Los gimnasios reabrieron sus puertas el pasado 14 de octubre, luego de 7 meses de inactividad. Al igual que otros giros, tuvieron que adaptarse a la nueva normalidad y aunque ya contaban con protocolos, estos se reforzaron y se adecuaron a las necesidades actuales. Todo empieza a la hora en que llegan los socios y los instructores, que deben entrar sin objetos personales, solo sus bebidas. "Desde la entrada se viene manejando lo que es la sana distancia también como es la toma de temperatura el gel antibacterial y bueno cada persona tiene que tomar una franela para desinfectar su equipo antes y después de usarlo, es importante que también las personas traigan su cubrebocas si no no tienen derecho a entrar al gimnasio una toalla personal", explicó Marco Montero, instructor en el gimnasio Arena.

Los costos han aumentado para los empresarios pues en este caso, se sanitiza el equipo y el espacio cada hora luego de cada bloque de personas que acuden a ejercitarse, las franelas y demás sustancias se proporcionan por parte del gimnasio, a los instructores incluso se les dota con cubrebocas. "A la hora de salir tiene que depositarlos, cuando acaban su bloque de hora y media salen, depositan su franela en el bote, ahí está especificado que tiene que dejarla antes de desalojar el gimnasio y todas esas franelas ya no se vuelven a utilizar hasta el día siguiente una vez que estén limpias, lavadas", agregó.

Por su parte los usuarios han aceptado y acatan las nuevas medidas de higiene y prevención, se van turnando en los espacios y participan de la limpieza. "La gente está pues feliz de regresar la verdad es que están muy muy feliz de regresar, aun así sabiendo que tiene un horario establecido y que tiene que salir de tal a tal hora", refirió.

La recuperación para este sector será de a poco, pues la condición de operar únicamente con el 30% de su capacidad, también limita sus ingresos.