La inconformidad crece entre padres de familia en todo el estado de Nayarit. De acuerdo con denuncias recientes, varias escuelas primarias continúan presionando a los tutores para recolectar botellas de plástico y otros materiales reciclables, actividad que algunos directivos utilizan como forma de obtener ingresos para mantenimiento escolar. El problema no sólo radica en la carga adicional que esto representa para las familias, sino en que ?según reporta la Asociación Estatal de Padres de Familia? en algunos planteles se está insinuando o condicionando la calificación de los alumnos a la entrega de PET, aluminio u otros materiales.
Leopoldo García, presidente de la asociación, señaló que esta práctica lleva años repitiéndose y que, aunque algunos directores piden apoyo de manera respetuosa, existen casos en los que la presión se ha convertido en hostigamiento.
"Año con año hemos recibido denuncias. Muchos directivos buscan el apoyo de los padres para recolectar PET o aluminio, pero otros lo exigen y hasta amenazan. Hay denuncias de que deben llevar cierto material para generar recursos. Algunos incluso insinúan que, si no participan, podría afectar la calificación de los niños. Esto debe regularse", afirmó García.
El representante pidió a los Servicios de Educación Pública del Estado de Nayarit (SEPEN) intervenir de manera urgente para poner orden y evitar que se mezclen las responsabilidades educativas con actividades de recaudación que, según aseguran los padres, no deberían ser obligatorias ni mucho menos estar vinculadas al desempeño académico de los estudiantes.
La petición principal es clara: que se detenga el hostigamiento y que se busquen mecanismos transparentes y justos para obtener recursos sin perjudicar ni presionar a las familias.