El auge del comercio electrónico ha revolucionado la forma en que consumimos, y la industria de la moda no es la excepción. Plataformas chinas como SHEIN, Temu y AliExpress se han convertido en las favoritas de millones de mexicanos.
La respuesta es sencilla: comodidad, precios y conveniencia. La competencia en el mercado digital es feroz, sin embargo, las plataformas chinas han logrado captar la atención de los consumidores más jóvenes gracias a su modelo de negocio basado en la producción masiva y la rápida rotación de productos.
Según cálculos de la Cámaras de Comercio, cada mes ingresan a México más de un millón de paquetes de ropa provenientes de China, principalmente a través de estas plataformas. El Estado de México concentra el 5% de las importaciones.
Mientras las ventas en línea de ropa china siguen en ascenso, la industria textil mexicana enfrenta una situación crítica. La Cámara Nacional de la Industria del Vestido ha denunciado una "competencia desleal" por parte de plataformas como SHEIN y Temu, lo que ha provocado la pérdida de más de 20 mil empleos .
Ante esta situación, el gobierno mexicano ha decidido tomar medidas. Recientemente, se publicó un nuevo decreto que establece aranceles del 35% a las importaciones de mercancías confeccionadas y del 15% a productos textiles provenientes de países con los que no se tienen acuerdos de libre comercio.
Estas medidas buscan proteger a la industria textil nacional y garantizar condiciones de competencia más equitativas.
La búsqueda de precios bajos y la comodidad de comprar en línea son tendencias difíciles de revertir. Sin embargo, la defensa de la producción nacional y la promoción de una moda más sostenible son temas que cada vez cobran mayor relevancia.