El sector privado proyecta un aumento anual de los precios al consumidor de 4.4% para diciembre de 2024, con la expectativa de que este indicador disminuya a 3.9% para el mismo mes de 2025. Estas cifras reflejan una tendencia hacia la estabilización de la inflación en el mediano plazo, aunque todavía se mantienen por encima de los objetivos establecidos por el Banco de México.
Estos datos sugieren un entorno económico con presiones inflacionarias persistentes, aunque con señales de moderación en comparación con el año 2024.
A pesar de estas proyecciones, el control de la inflación sigue siendo un reto clave para garantizar la estabilidad económica del país y fortalecer el poder adquisitivo de la población.
