Grupos de mexiquenses acudieron afuera de las instalaciones del Hospital para el Niño IMIEM, donde regalaron sonrisas a los infantes que se encuentran hospitalizados, asistieron a consulta o que se encuentran en vulnerabilidad.
Estos grupos de mexiquenses arribaron en autos y camionetas cargando pelotas, muñecas, carritos y dulces. Una vez estacionados, empezaron a regalar sonrisas a los niños que se acercaron a ellos.
Para la familia Pérez, esta actividad altruista la realizan como una promesa, además de agradecimiento, pues en años pasados tuvieron a una de sus hijas hospitalizada en este nosocomio.
Para los demás grupos de activistas, poder regalar una sonrisa una vez al año en un día significativo representó la mejor recompensa del día, pues a lo largo de estas instalaciones también estuvieron presentes niños en condición de algún tipo de pobreza.