De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2024, el 47.9 por ciento de las carpetas de investigación iniciadas por el Ministerio Público o Fiscalía estatal no tuvo ningún avance o fue abandonada, lo que representa un aumento en comparación con el 46.1 por ciento registrado en 2022.
Además, el 27.6 por ciento de las carpetas aún sigue en trámite, mientras que solo el 5.3 por ciento de los casos denunciados logró que el delincuente fuera puesto a disposición de un juez. Por otro lado, uno de cada tres delitos ni siquiera dio lugar a la apertura de una carpeta de investigación.
Entre las principales razones por las que las víctimas optan por no denunciar destacan la pérdida de tiempo, la desconfianza en la autoridad, la burocracia excesiva, el trato hostil por parte de las autoridades y el miedo a represalias o extorsión.
El tiempo que toma interponer una denuncia también es un factor determinante. Según la ENVIPE 2024, el 40.9 por ciento de las víctimas requirió dos horas o menos para realizar el trámite ante el Ministerio Público o Fiscalía, pero un 35.3 por ciento reportó haber invertido más de cuatro horas en el proceso.