Existen espacios que resguardan legados y pasillos que emanan historia. La Secundaria Técnica Número 2 "Tierra y Libertad" es uno de ellos: un recinto donde, en sus orígenes, la educación fue un faro para la clase trabajadora que, tras la jornada, buscaba hacerse de conocimiento, y que hoy sigue forjando una nueva generación de profesionistas con visión de futuro.
Ubicada en el corazón de Toluca.
La historia de la "Tierra y Libertad" se remonta a la década de los sesenta, cuando surgió como respuesta a la necesidad de acercar la educación a la clase obrera mexiquense. Primero funcionó en las oficinas agrarias, pero pronto cobró forma en el edificio construido ex profeso para albergar la Escuela Secundaria Nocturna para Trabajadores "Tierra y Libertad".
El 4 de septiembre de 1961, el entonces presidente Adolfo López Mateos inauguró este modelo educativo nocturno, que se mantuvo vigente durante más de seis décadas, hasta el año 2023.

Apenas unos meses después, el 2 de marzo de 1962, el plantel comenzó a operar como Secundaria Técnica Número 2, alcanzando un reconocimiento continental como una de las instituciones mejor equipadas de Latinoamérica, con tecnología de vanguardia para su época.
Hoy, a 64 años de su fundación, el modelo nocturno ha quedado atrás, pero el espíritu formativo de la clase trabajadora sigue impregnado en cada rincón. Actualmente, 976 alumnos cursan sus estudios en este plantel, que conserva desde sus orígenes nueve talleres de formación práctica en áreas de comercio, industria, servicios y agropecuarias.
A lo largo de su historia, la "Tierra y Libertad" ha visto surgir a grandes figuras, como el muralista Leopoldo Flores, uno de sus hijos pródigos, cuyo arte refleja el sentido social que ha caracterizado siempre a esta escuela. Ese mismo espíritu se vincula con el ideal zapatista que inspiró su nombre: que la educación no sea privilegio del hacendado, sino un derecho compartido también por la clase obrera.

Más de seis décadas después, la Secundaria Técnica Número 2 resiste al paso del tiempo. Su historia late en cada taller, en cada generación que pasa por sus aulas, y en la memoria viva de Toluca.