Decenas de miles de personas salieron a las calles en varias ciudades importantes de Estados Unidos para protestar contra las políticas del presidente Donald Trump, lo que provocó que hubiera varios detenidos, sin que hasta ahora se haya precisado el número de arrestos.
Mientras que el mandatario participó en un desfile militar, para celebrar el 250 aniversario del ejército estadounidense, pero que coincide con su cumpleaños, por lo que las críticas fueron en el sentido de que para alimentar su ego organizó la parada militar.
En Palm Beach, Florida, donde se encuentra el domicilio del mandatario, miles se manifestaron, primero en el parque para patinetas Phipps, a unos dos kilómetros de Mar- a-Lago, pero con las horas se fueron acercando hasta quedar a solo unos metros de la residencia privada de Trump.
Los gritos de no al autoritarismo y en defensa de la democracia salieron a relucir, incluso la jornada se nombro "No Kings Day", organizada por el movimiento 50-50-1, que significa 50 estados, 50 manifestaciones 1 solo movimiento.
Otra manifestación que coincidió es el Mes del orgullo, por lo que activistas por los derechos de la comunidad LGTBI se sumaron a las protestas. Declaraciones de Trump advirtieron que su administración no reconocería derechos de las minorías como su identificación o adscripción, es decir sólo habrá dos sexos masculino y femenino.
Los Ángeles, Nueva York, Filadelfia, Washington, Texas fueron los lugares emblemáticos, aunque la capital del país y California, por la presencia de migrantes, se convirtieron en el epicentro de la información.
En Minnesota se registró el homicidio de la ex presidenta del Congreso local, Melissa Hortman, la noticia conmocionó al estado y decidieron cancelar las movilizaciones.
En el First Ward Park de Charlotte miles de personas, muchas de ellas acudieron en familia, acudieron portando pancartas contra "el rey Trump", una de las mantas principales decía "El poder del pueblo es más fuerte que quienes ostentan el poder".
Una de las concentraciones más numerosas se dio en Los Ángeles, donde desde temprano se congregaron frente al City Hall o ayuntamiento, para iniciar la movilización.
En Nueva York, otro de los principales puntos, los manifestantes se congregaron frente a la icónica Biblioteca Pública, a pesar de la lluvia el ánimo no decayó.
Mientras, al menos 20 mil se reunieron pacíficamente en el centro de San Diego y la principal concentración en Filadelfia, donde se habla de hasta 80 mil participantes, acabó con energía festiva y pacífica.
Luego de que se declarara ilegal la movilización policías de Los Ángeles lanzaron gases y bombas "aturdidoras" obligaron a los asistentes a buscar salidas por diferentes calles.
En Washington, ni la lluvia detuvo el desfile militar, cuando el presidente subió al templete, suena el himno nacional de los Estados Unidos y arrecia la lluvia, pero Trump no se mueve. Lo que se adelantó fue el paso de las fuerzas armadas, nos seis mil 700 soldados, ataviados con uniformes que el ejército utilizó en diferentes momentos de su historia desde el inicio de la independencia en 1775 hasta la Guerra del Golfo en 1991.
"Si amenazas al pueblo estadounidense, nuestros soldados irán por ti. El Ejército de Estados Unidos ha hundido bayonetas en los corazones de los imperios del mal", dijo en su discurso el mandatario.
Mientras en el centro de Los Ángeles, donde se decretó el toque de queda, los últimos manifestantes se enfrentan a las fuerzas del orden que siguen lanzando gases contra la multitud y comienzan los arrestos, decenas dijeron las autoridades, pero sin precisar el número.