El cacicazgo de los mototaxis en Chiapas, se ha convertido en un jugoso negocio, en donde el más beneficiado es el propietario de la unidad con la cual se presta el servicio público de pasajeros.
Sin una concesión de promedio de la Secretaria de Movilidad y Transporte, estas unidades motorizadas operan con impunidad en varios municipios de Chiapas.
San Fernando, Ocozocoautla, San José Terán, El Jobo, Berriozábal, Villaflores, por mencionar algunos.
Tan solo en San Fernando, según el último censo del 2021 existían 236 unidades, un servicio que genera alrededor de 2 millones 227 mil 500 pesos, movilizándose a 60 personas diariamente, alrededor de 30 viajes promedio.
En Berriozábal, se realizan 9 mil 372 viajes diarios, todo lo anterior de acuerdo a un diagnóstico de la Movilidad Urbana realizado por el Plan Integral de Movilidad Urbana sustentable de la Zona Metropolitana de Tuxtla Gutiérrez.
Las tarifas varían en cada municipio y se establecen de acuerdo al recorrido, y van de los 15 hasta los 80 pesos promedio.
"Como unas 100 personas, ¿un pasaje un traslado de un punto a otro que precio tiene? Depende de donde lo agarremos, y donde vaya, ¿Cuáles son las tarifas? Pues pongamos si es del parque a la Clínica de la Mujer 15 pesos, si es del Parque a la Laguna 70 u 80 pesos."
Estos jóvenes operadores tienen sus limitaciones territoriales para ofrecer el servicio y en caso de un operativo, el patrón es quien da el pitazo para ocultar las unidades, a través de un grupo de WhatsApp creado por el dueño de la moto taxi.
"Él lo manda en el grupo y dice tengan cuidado porque va entrar operativo y ya lo vamos a esconder un rato y ya cuando se van ya avisan en el grupo y ya volvemos a entrar."
Adquirir una unidad de estas oscila entre los 50 y 80 mil pesos nueva y una de segundo mando su precio oscila entre los 20 y 25 mil pesos y la gran mayoría opera fuera del marco de la ley.