Científicos del Centro de Fertilidad de la Universidad de Columbia, en Estados Unidos, reportaron el primer embarazo exitoso logrado con ayuda de un sistema de Inteligencia Artificial (IA) diseñado para recuperar esperma en hombres con azoospermia, una condición en la que el semen contiene poco o ningún espermatozoide
El caso, descrito en una carta de investigación publicada en la revista The Lancet, marca un avance importante en el tratamiento de la infertilidad masculina, un problema que representa cerca del 40 % de los casos de infertilidad en las parejas, según los autores del estudio.
La azoospermia afecta entre el 10 y el 15 % de los hombres con infertilidad. A simple vista, su semen puede parecer normal, pero bajo el microscopio no se detectan espermatozoides.
"Lo que se ve es un mar de restos celulares sin vida", explicó Zev Williams, autor principal del trabajo y director del Centro de Fertilidad de Columbia.
Hasta ahora, las opciones eran limitadas.

Algunos pacientes se someten a cirugías para extraer espermatozoides directamente de los testículos, aunque los resultados suelen ser poco alentadores y conllevan riesgos como inflamación, daño vascular o una baja temporal de testosterona
Cómo funciona el método STAR
El equipo de Columbia desarrolló un nuevo procedimiento llamado STAR (Sperm Tracking and Recovery), que combina tecnología de imagen, IA y microchips de precisión.
Primero, el sistema escanea millones de imágenes de una muestra de semen en menos de una hora. Luego, la IA identifica posibles espermatozoides viables, y un chip microfluídico -un dispositivo con canales del grosor de un cabello- aísla las partes de la muestra donde se encuentran.

Finalmente, un robot extrae los espermatozoides en milésimas de segundo, para que puedan usarse en una fecundación in vitro o congelarse para el futuro
Un solo espermatozoide bastó
El método se probó en un paciente que llevaba casi dos décadas intentando tener un hijo. Había pasado por múltiples tratamientos de fertilidad y cirugías sin éxito.
Con una muestra de solo 3.5 mililitros de semen, el sistema STAR analizó 2.5 millones de imágenes y logró encontrar dos espermatozoides viables. Con ellos se crearon dos embriones, y uno resultó en un embarazo exitoso.

"Solo hace falta un espermatozoide sano para crear un embrión", señaló Williams, subrayando el potencial de esta tecnología para casos donde antes no había opciones
Lo que sigue
Aunque se trata de un solo caso clínico, los resultados muestran que la IA podría cambiar el enfoque del tratamiento de la infertilidad masculina severa.
El equipo de Columbia ya realiza estudios más amplios para evaluar la eficacia del método STAR en otros pacientes.

Si los resultados se confirman, esta tecnología podría ofrecer una nueva esperanza a hombres con azoospermia y a parejas que han enfrentado largos años de intentos fallidos de concebir