¿Aun existe la política en México?

La política en México enfrenta una etapa de profunda transformación, una de las decisiones más recientes del congreso ha sido la aprobación de una reforma que permite a las autoridades intervenir comunicaciones sin necesidad de una orden judicial previa, aunque se argumenta que esta medida busca fortalecer la seguridad pública, diversos sectores han expresado su preocupación sobre los riesgos que implica para las libertades individuales y los derechos civiles.

El contexto en el que se da esta reforma no es menor, en la actual Cámara de Diputados, el partido Morena, junto con su coalición concentra cerca del 73% de los integrantes, esta mayoría calificada les permite aprobar leyes y modificar disposiciones constitucionales sin necesidad de acuerdos con otras fuerzas políticas, debilitando así los contrapesos y reduciendo el margen de la oposición.

Ante esta realidad, surge una pregunta legítima: ¿sigue existiendo la política como espacio plural, de representación y diálogo democrático? El avance de una sola fuerza sobre las estructuras institucionales plantea un escenario en el que la deliberación pública puede verse reemplazada por decisiones unilaterales y una narrativa única.

En cualquier régimen democrático, disentir no es una amenaza, es un derecho, pues defender la política implica defender la libertad de expresión, la transparencia institucional y el equilibrio entre poderes.