Microsoft anunció que su nuevo centro de datos de inteligencia artificial (IA) en Mount Pleasant, Wisconsin, será "el más potente del mundo" y confirmó una inversión adicional de 4.000 millones de dólares para ampliarlo
El centro, llamado Fairwater, abrirá a principios de 2026 y promete transformar la capacidad de computación de la empresa.
Fairwater almacenará "cientos de miles" de procesadores gráficos (GPU) de Nvidia para entrenar modelos de IA, con una potencia diez veces superior a la de las mejores supercomputadoras actuales.
El sistema de enfriamiento utilizará un ciclo cerrado de líquidos que no requiere agua, y toda la energía consumida se compensará con fuentes renovables, según explicó el CEO Satya Nadella en la red social X.
El centro contará con un sistema integrado que permitirá computación "a escala exponencial", fortaleciendo la capacidad de Microsoft para procesar grandes volúmenes de información y desarrollar soluciones de inteligencia artificial avanzadas
Expansión y planes futuros
Brad Smith, presidente de Microsoft, detalló que la compañía invertirá 4.000 millones de dólares adicionales durante los próximos tres años para construir un segundo centro de datos de tamaño y escala similares, que estará operativo en 2027 o posteriormente.
Además, Microsoft construye otros centros idénticos en Estados Unidos y en el extranjero, que se suman a los más de cien centros activos que la multinacional tiene en funcionamiento alrededor del mundo.
El centro Fairwater se levanta en el mismo terreno donde, en 2018, el presidente Donald Trump prometió que Foxconn construiría una fábrica de 10.000 millones de dólares, proyecto que finalmente nunca se concretó.
La elección de Mount Pleasant refuerza la apuesta de Microsoft por consolidar su infraestructura de IA en Estados Unidos, combinando tecnología de vanguardia con sostenibilidad energética
La compañía asegura que estas instalaciones no solo potenciarán sus capacidades de IA, sino que también servirán como modelo de eficiencia energética y sostenibilidad en centros de datos.
Con estas inversiones, Microsoft busca liderar la computación de próxima generación y fortalecer su posición global en el desarrollo de inteligencia artificial.