Chocar un automóvil no solo implica reparar el daño de otro vehículo, también puede convertirse en un gasto millonario para el responsable. De acuerdo con especialistas en movilidad, los conductores están obligados a cubrir no solo las afectaciones a particulares, sino también los daños a la vía pública, mobiliario urbano e incluso indemnizaciones por lesiones o fallecimientos.
En un percance menor, la reparación de un automóvil puede superar los 50 mil pesos, mientras que derribar un semáforo o poste de luz cuesta entre 1,700 hasta 15 mil dependiendo del daño. Sin embargo, los gastos se elevan cuando hay personas lesionadas, pues los tratamientos médicos pueden alcanzar cifras cercanas al millón de pesos.
Gastos por choque
Daños a vehículo: +50 mil
Daño a semáforo: 1,700
Remolcar vehículo siniestrado: 3,394.2
Persona lesionada u homicidio: 500 mil a 1,000,000
Fuente: Aseguradoras / reglamento de tránsito
El panorama es aún más grave en caso de un deceso. Conforme a la legislación mexicana, la indemnización por muerte derivada de un accidente vial puede superar el millón de pesos, además de enfrentar un proceso penal por homicidio culposo que puede derivar en prisión.
Ante este escenario, autoridades de tránsito recomiendan a la población contar con un seguro de automóvil con cobertura de responsabilidad civil, obligatorio en carreteras federales, además de adoptar medidas preventivas como respetar los límites de velocidad, evitar conducir bajo los efectos del alcohol y mantener en buen estado los vehículos.