Cientos de fieles de todo el país se congregaron en el Santuario del Padre Jesús de Petatlán, mejor conocido como Papá Chuy, para agradecer favores recibidos y pedir por sus seres queridos, en una de las celebraciones religiosas más importantes de la región Costa Grande.
Desde la madrugada, peregrinos llegaron caminando, en bicicleta o en vehículos particulares desde municipios cercanos como Zihuatanejo, Tecpan y Atoyac, así como desde otros estados como Michoacán, Querétaro, Jalisco e incluso de la Ciudad de México. Grupos y mariachis cantaron en honor a papá Chuy.
Una de las fieles asistentes elevó sus plegarias especialmente por los paisanos en Estados Unidos, quienes hoy enfrentan una situación complicada con el gobierno de Donald Trump. Piden que no los vayan a correr, que les den chance de seguir trabajando para sus familias.
La celebración concluyó con música tradicional, rezos colectivos y la promesa de volver el próximo año, reafirmando el arraigo de esta devoción que une a comunidades locales y a los que viven lejos, pero que mantienen viva su fe en Papá Chuy.