Otro año sin nada que celebrar la Libertad de Expresión
El país se mantiene como uno de los más peligrosos en todo el mundo para los profesionales de la información, por lo tanto, no hay mucho que celebrar a la Libertad de Expresión, sobre todo porque México se encuentra en una etapa en la que atreverse hacerlo, se vuelvo objeto de linchamientos sociales.
Sobre todo cuando una o un periodista señala al Presidente Andrés Manuel López Obrador, o alguno de sus funcionarios, emanados del partido Movimiento de Regeneración Nacional.
En el caso de la prensa, la situación en México puede sintetizarse en un conflicto entre los medios y el actual gobierno. La administración federal ha sido temerariamente crítica de los periódicos y voces que no están de acuerdo con sus proyectos económicos, políticos y sociales.
Pero el problema va mas allá de recibir insultos de seguidores. A lo largo del 2020, se detectó el asesinato de ocho expertos de noticias, en agresiones directamente relacionadas a su actividad en los medios.
De los 139 periodistas muertos en todo el país, el 46 por ciento cubría temas de crimen organizado en alguna forma y el 39 por ciento informaban sobre política
De acuerdo a la "Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa" que año con año realiza la organización internacional, Reporteros Sin Fronteras, en este 2021 y por segundo año consecutivo, México se encuentra en el lugar 143 de 180, del ranking de los países de más alto riesgo para esta noble profesión.
Casi la mitad de los periodistas asesinados informaron haber recibido amenazas, ya fuera mediante publicaciones en redes sociales o a sus jefes o a las autoridades. Solo diez de ellos recibieron algún tipo de protección del gobierno.
Según el Artículo 19 de la organización para la libertad de prensa, los estados de Veracruz, Tamaulipas, Oaxaca, Guerrero y Chihuahua son llamadas "zonas de silencio", porque los asesinatos selectivos de periodistas generan cada vez mayor temor y llevan a la autocensura.