Los constantes derrames de aguas negras provocados por las recientes precipitaciones en la ciudad están generando un escenario propicio para la proliferación de enfermedades y fauna nociva, advirtió el médico internista José Natividad González González.
El especialista explicó que el agua contaminada se convierte en criadero de mosquitos y favorece la presencia de cucarachas, ratas y otros roedores, lo que incrementa el riesgo de padecimientos como salmonelosis y fiebre tifoidea. "Son las tres condiciones que posiblemente aumenten, además de dermatosis, que es una afección común cuando hay contacto con aguas contaminadas. Generalmente aparece por irritación, aunque su impacto es menor comparado con las otras enfermedades", detalló.
González González recomendó a la población mantener patios limpios, evitar tirar basura y, en caso de detectar corridas de agua cercana, procurar que estas se mantengan desocupadas. "El gobierno no puede atender todo de inmediato, por eso es importante que cada familia adopte medidas preventivas", subrayó.