Las madres de Julio César Zúñiga Luna y Jesús Iván Rodríguez Leiva, pescadores originarios de Baja California Sur detenidos en San Diego, exigieron públicamente la intervención de las autoridades estatales y federales ante el proceso legal que enfrentan sus hijos en Estados Unidos, donde se les acusa de tráfico de personas.
Ambos jóvenes, buzos con experiencia en la comunidad pesquera de Puerto San Carlos, salieron repentinamente con la intención de buscar empleo. Según relataron sus familias, no fueron informadas del motivo del viaje ni del destino. Días después, se enteraron de su situación a través de redes sociales y llamadas que alertaban sobre un accidente en altamar.
Desde entonces, denuncian que no han recibido información oficial ni acompañamiento de ninguna autoridad, lo que ha generado incertidumbre y preocupación entre los familiares.
"Hasta el momento, nada del gobernador. Esperamos una respuesta de parte de él porque la situación está muy grave, y a través de él queremos llegar a la presidenta, que nos escuche y nos haga justicia", declaró María Micaela Luna, madre de Julio César.
Las madres, que viven en diferentes municipios del estado, expresaron que enfrentan solas esta situación, sin conocer con claridad el estado legal de sus hijos ni el avance del proceso que enfrentan.
"Ha sido caótico, la verdad. Muy estresante y desesperante no poder saber nada de ellos, ni cómo va realmente el caso que lleva cada uno. Es muy duro no tener información de ninguno de los dos", dijo Fátima Leyva, madre de Jesús Iván.
Durante su visita a La Paz, fueron atendidas por el secretario general de Gobierno y representantes de la Secretaría de Gobernación federal, sin embargo, quedaron inconformes al no ser recibidas por el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío.