El procurador general de justicia del estado, Antonio López Rodríguez, aseguró que la pugna del crimen organizado no es un fenómeno exclusivo de Baja California Sur, sino parte de una dinámica nacional que repercute en todos los estados del país.
En ese contexto, señaló que la delincuencia organizada opera desde múltiples frentes, con líderes que no necesariamente se encuentran físicamente en la entidad, pero que sí influyen directamente en la violencia local.
"La delincuencia organizada es a nivel nacional, no es un delito estatal ni federal. Eso no significa que como procuraduría no tengamos el mapa delictivo ni conocimiento de quiénes son las personas que están operando", afirmó el funcionario.
Añadió que muchas veces los cabecillas aparecen como si estuvieran en la esquina, pero en realidad dirigen operaciones desde otros estados, lo que dificulta el trabajo local debido a las diferencias legales y operativas entre entidades.
Subrayó que no se necesita ser procurador ni experto en seguridad para notar que los conflictos entre grupos criminales son visibles todos los días en los medios, especialmente en estados como Sinaloa. "Todos los días vemos que se están peleando, y eso lo vemos en las noticias", dijo, al puntualizar que en el catálogo delictivo revisado por las autoridades, al menos 18 delitos son recurrentemente cometidos por el crimen organizado, siendo los principales el narcomenudeo y la prostitución.
"El estado no es ajeno a esta realidad y no es sorpresa para nadie", sentenció. A pesar de ello, afirmó que la labor institucional continúa enfocada en controlar y erradicar la presencia de estas estructuras criminales, con trabajo diario y coordinación entre niveles de gobierno.