En conferencia de prensa, la Alianza por la Calidad del Aire (ACA) llamó a fortalecer la coordinación entre las autoridades ambientales y la Secretaría de Salud de Baja California Sur, con el objetivo de prevenir enfermedades asociadas a la contaminación atmosférica, subrayaron la necesidad de que el Comité de Vigilancia Epidemiológica incorpore indicadores de calidad del aire para mejorar el monitoreo y la atención de riesgos sanitarios.
La investigadora de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), Lilia Alonso Lozano, señaló que tanto el Programa de Gestión para Mejorar la Calidad del Aire (ProAire) como diversos estudios científicos han documentado que en La Paz se registran alrededor de 12 muertes anuales por cáncer de bronquios y pulmón y podrían estar relacionadas con la exposición a partículas PM2.5.
"Esta última es para La Paz en especial porque es donde tenemos el monitoreo, es el único lugar donde hay monitoreo y en donde digamos que se ha concentrado más, habría que ver los demás municipios".
Indicó que estas cifras deben ser consideradas en la toma de decisiones públicas, ya que representan un factor de riesgo persistente para la población.
Por su parte, Jaqueline Valenzuela, directora del Centro de Energía Renovable y Calidad Ambiental (CERCA), informó que el Gobierno del Estado destina cerca de 1,600 millones de pesos anuales en atención médica derivada de enfermedades vinculadas a partículas PM2.5. Agregó que este monto no incluye los costos originados por otros contaminantes, cuya medición aún es limitada.
La directora de CERCA insistió en que es fundamental establecer un diálogo con la Secretaría de Salud para que el Comité de Vigilancia Epidemiológica integre formalmente los indicadores de calidad del aire, lo que permitiría mejorar la prevención, detección y atención de enfermedades asociadas a la contaminación.