Desde diciembre, la Escuela Primaria Venustiano Carranza inició la demolición de uno de sus edificios debido a fallas estructurales, un hecho que ha mantenido a padres y madres de familia en constante vigilancia ante la construcción de las nuevas aulas.
Según las autoridades de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y del Instituto Sudcaliforniano de Infraestructura Física Educativa (ISIFE), se espera que la construcción de las nuevas aulas comience el 15 de julio. Está previsto construir seis aulas para una matrícula actual de 400 estudiantes, sin embargo, persisten dudas sobre el destino de tres grupos que actualmente no cuentan con un salón asignado.
Marina Fresnedo, integrante de la Mesa Directiva de la Escuela Venustiano Carranza, expresó la preocupación de los padres respecto a la situación de los tres grupos sin aula asignada. "Iniciando las vacaciones fuera de eso. Lo que más nos preocupa ahora es el reinicio de año porque se supone que solamente nos harán seis aulas basándose en la matrícula actual, pero queremos saber si nos pueden responder nuestra duda de qué va a pasar al inicio del año con tres grupos que no cuentan con salón", señaló Fresnedo.
Desde enero, los grupos de primero a tercero y sexto año retomaron clases en los salones que no presentaron afectaciones, mientras que estudiantes de cuarto y quinto año fueron trasladados al edificio de la Ciudad de los Niños.
No obstante, las condiciones del edificio de la Ciudad de los Niños no son óptimas. Se han reportado golpes de calor debido a la falta de aire acondicionado, ventiladores y sombra adecuada. "Hay cierta parte de alumnos cuyos padres de familia y maestros están inconformes porque ha habido golpes de calor debido a que el edificio de la Ciudad de los Niños no está en las mejores condiciones. No se pueden poner aires acondicionados ni ventiladores, y no hay sombras. Claramente, la SEP no va a querer invertir en un edificio provisional", agregó Fresnedo.
Para llamar la atención sobre la problemática, padres y madres de familia han reafirmado su posición de que la Escuela Venustiano Carranza no debe cerrar y que la construcción de las nuevas aulas debe completarse sin afectar las actividades académicas. La educación de los niños y niñas no debe verse comprometida por la falta de infraestructura adecuada.