Durante las últimas lluvias que se han registrado en gran parte del Estado de Guanajuato, se ha logrado que las presas se recuperen, incluyendo la Laguna de Yuriria. Sin embargo, la situación sigue siendo variable y depende de la continuidad y distribución de las precipitaciones, de acuerdo a la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Según el seguimiento técnico de la evolución de la sequía en Guanajuato, integrando el análisis territorial por categoría, el impacto en Áreas Naturales Protegidas (ANP), la Laguna de Yuriria se encuentra un poco más arriba del 42% de su capacidad, mientras que la presa Solís, la más grande del estado, va por arriba del 80% de su capacidad operativa.