El descubrimiento de un campo de reclutamiento y exterminio ubicado en Teuchitlán Jalisco en el rancho Izaguirre el 5 de marzo, ha destapado el horror del delito de las desapariciones forzadas, México y sus ciudadanos son otros a partir de esta noticia que ya es difundida a nivel internacional.
Pero en Guanajuato se niega sistemáticamente la existencia de estos campos del terror, los altos mandos encargados de impartir justicia aseguran que en el estado no tienen registrados lugares de exterminios masivos.
Pero los contextos de hallazgos en Guanajuato se han encontrado sitios donde se han calcinado restos humanos o donde se tratan de desaparecer cuerpos de diferentes maneras.
Cada quien tiene sus datos.
En el año 2022 fueron registrados dos sitios de este tipo en Guanajuato uno en Moroleón y el otro en León.
Están también las fosas de Acámbaro, Salvatierra y el Sauz de Villaseñor en Celaya.
Fuente: Plataforma por la Paz y la Justicia en Guanajuato
Colectivos de Búsqueda han dado cuenta de la presencia de estos campos de extermino en la Sierra de Lobos y en Salvatierra, incluso estos hallazgos los ha documentado la Guardia Nacional en los años 2022 y 2024.
Fuente: Fiscalía General de Guanajuato / Plataforma por la Seguridad y la Paz en Guanajuato
En tanto desde el Congreso Local de Guanajuato legisladores exigen contundencia y empatía parar afrontar esta crisis de carácter humanitario que se extiende a lo largo y ancho del país.
Pero los municipios que trabajo hacen al respecto, donde está la coordinación entre los tres niveles de gobierno, la situación no pinta nada bien tras el hallazgo en Jalisco.
Favor de quitar mi voz para pegar
En el año 2020 y durante el sexenio de López Obrador se tienen el registro de al menos mil 350 hallazgos de fosas clandestinas, 556 en 2021, 290 en el 2022, 297 en el 2023, y 244 en el año 2024, sumando 2 mil 737 fosas todas ellas en Jalisco 677, Sonora 298, Guanajuato 253, Sinaloa 174 y Baja California 171.
Fuente: Causa en Común