Imagina que es 24 de diciembre. El nacimiento está listo para que solo falte colocar al Niño Dios, los bolos esperan en la mesa, las luces navideñas parpadean en colores y las piñatas aguardan a ser quebradas al ritmo de "dale, dale, dale, no pierdas el tino?". Es una actividad que también disfrutan los adultos
Dentro del calor del hogar, entre comida calientita y la alegría de compartir con quienes quieres, te sientes afortunado de vivir ese momento y saber que todavía queda el día siguiente, porque el 25 el recalentado vuelve a reunir a todos.
Sin embargo, hay personas que no pueden celebrar así debido a su carrera, al tipo de trabajo que tienen o simplemente porque no les alcanza y necesitan laborar lo más que puedan.
Como la cajera de una tienda que observa cómo otros compran pavo, cerveza, suéteres y adornos, mientras ella recibe reclamos por incidentes que, como cajera, escapan por completo de su control.
Tal vez piensa que, con suerte, la próxima Navidad sí podrá pasar ese día con sus seres queridos.

Mientras muchos descansan, otros mantienen al país en marcha. Las emergencias no esperan, las ventas siguen, el transporte no se detiene. Y ahí aparece la pregunta inevitable: ¿quién sostiene a México cuando todos celebran?
Lo esencial nunca descansa: los servicios que sostienen la vida
Antes de hablar de comercio, fiestas o turismo, hay que comenzar donde siempre comienza la continuidad de un país: los servicios esenciales.
En México, los hospitales públicos y privados- no conocen el concepto de "cerrar por Navidad". IMSS, ISSSTE, Cruz Roja, ambulancias, urgencias, laboratorios y farmacias de turno trabajan bajo la misma lógica: las emergencias no paran el 24 ni el 25, ni nunca.
Los médicos que atienden un infarto a las dos de la mañana del 25, o las enfermeras que reciben a un recién nacido en la madrugada del 24, no están ahí por heroísmo, sino porque la estructura de atención está diseñada desde cero para funcionar 24/7.
La idea de que el país se "calma" en Navidad es más mito que realidad. Policía municipal y estatal, Guardia Nacional, bomberos, Protección Civil y el 911 se mantienen en operación completa.
Incendios, accidentes viales, riñas familiares, llamadas de auxilio: la vida diaria no suspende sus riesgos porque sea 24 o 25 de diciembre.
Por eso, los cuerpos de seguridad trabajan con guardias predefinidas cada año. En estos sectores, el "día festivo" se traduce en personal mínimo? pero personal al fin.

En diciembre de 2024 se registraron 1.28 millones de llamadas procedentes al 911, las cuales se derivaron a policías, bomberos y Protección Civil
Servicios urbanos: el otro sistema nervioso del país
A veces olvidamos que un apagón el 24 en la noche no es solo un inconveniente: sería un colapso.
La Comisión Federal de Electricidad monitorea subestaciones y redes en tiempo real. Los sistemas de agua potable, como SACMEX en CDMX, mantienen presión, reparan fugas y supervisan pozos.
Recolección de basura crítica -especialmente en ciudades grandes- también sigue operando. ¿Por qué? Porque millones de cenas generan toneladas de residuos en menos de 24 horas.

Si estos servicios se detuvieran, la Navidad sería otra historia
La movilidad tampoco descansa: aeropuertos, carreteras y transporte
Mientras unas familias se reúnen, miles más se están moviendo.
Los aeropuertos internacionales de México -como el AICM- funcionan las 24 horas. El control de tráfico aéreo (SENEAM) es, por naturaleza, un servicio continuo.
Un avión no puede "regresar mañana" si falta personal.
En paralelo, centrales de autobuses, casetas de peaje, personal de autopistas y puertos mantienen operaciones porque diciembre es uno de los meses con más desplazamientos del año.
Los viajes familiares, migrantes que regresan al país y turismo local hacen del 24 y 25 día de flujo constante.

En 2023, el Aeropuerto Internacional Benito Juárez de Ciudad de México, dio a conocer que hubo 26,675 operaciones totales durante el mes de Diciembre lo que ilustra la importancia de sus colaboradores durante estas fechas
Cuando el mercado manda: los sectores que trabajan porque diciembre es oro puro
Si los servicios esenciales operan por necesidad estructural, otros sectores lo hacen porque diciembre representa la caja registradora más activa del año.
Supermercados, tiendas departamentales, mercados y cadenas de autoservicio extienden horarios el 24 hasta medianoche.
Es el día de:
La Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) registra que diciembre puede representar incrementos del 8 al 12% respecto a meses normales, y que algunos giros generan hasta 30% de ventas anuales en ese mes.

El 25 muchos cierran... pero los grandes mantienen horarios reducidos porque hay demanda suficiente para justificarlo.
En Riviera Maya, Puerto Vallarta, CDMX o Los Cabos, la ocupación ronda el 90?100% en la semana navideña.
Personal de recepción, limpieza, alimentos y mantenimiento trabaja sin interrupción.
La temporada es demasiado rentable para detenerla.
Plataformas como Rappi, Uber Eats, DiDi Food, Amazon o Mercado Libre alcanzan picos de actividad el 23 y 24.
El 25 se mantiene alto: comida, compras improvisadas, recalentado que nunca llegó.

Para los repartidores, estos dos días pueden representar ingresos dobles o triples
Cuando detenerse cuesta millones: las industrias de proceso continuo
Hay sectores donde parar no es opción, incluso si el país entero está celebrando.
Un alto horno no puede apagarse porque sí. Enfriarlo abruptamente puede dañar la estructura, generar riesgos y costar semanas de reactivación.
Lo mismo ocurre con reactores petroquímicos, hornos cementeros y plantas químicas.
Hablar de "cerrar por Navidad" sería casi tan peligroso como apagar un avión en pleno vuelo.
Las vacas no entienden de calendarios: necesitan ordeña diaria.
Los pollos deben alimentarse.
Los invernaderos requieren ventilación y riego constante.

Un solo día sin atención significa pérdidas, mortandad o desperdicio de producto
Lala, Alpura, Bimbo, plantas de bebidas y procesadores de alimentos dependen de procesos continuos que no pueden pausarse sin arruinar toneladas de materia prima.
Internet, banca móvil, plataformas de streaming, líneas 01800? todo funciona gracias a centros de datos que operan, literalmente, cada segundo del año.
La Ley Federal del Trabajo es simple:
Si alguien trabaja el 25, recibe pago triple. Si cae en domingo, además se agrega prima dominical.

Incluso servicios esenciales deben pagar ese triple, aunque trabajen con personal mínimo
¿Por qué tantos mexicanos trabajan en Navidad?
No es nostalgia ni abandono familiar: es sistema.
El país que sostiene la fiesta
Mientras millones comparten una cena, otros tantos sostienen el andamiaje que permite que esa cena ocurra: desde el paramédico que atiende un accidente, hasta la trabajadora del hotel que limpia una habitación que nunca descansará.
La Navidad en México no se detiene porque el país tampoco puede detenerse.
Pero entender quiénes trabajan esos días -y por qué- ayuda a mirar la fiesta con otros ojos: cada celebración está sostenida por alguien que, en silencio, mantuvo la luz encendida.