Qué planea Corea del Norte: armas nucleares y ejército fuerte

El líder norcoreano, Kim Jong-un, anunció que el próximo congreso del Partido de los Trabajadores presentará una política que combinará el desarrollo de fuerzas nucleares con la modernización de las armas convencionales, según informaron medios estatales

Durante una visita a los institutos de armamento blindado y electrónico de la Academia de Ciencias de la Defensa, Kim supervisó pruebas de nuevos vehículos blindados, sistemas de protección activa y armas electrónicas, según la agencia estatal KCNA.

El dirigente subrayó la importancia de seguir modernizando las fuerzas convencionales para construir un ejército poderoso y competitivo, a la par que reafirmó que el noveno congreso del partido establecerá la estrategia de impulsar simultáneamente las capacidades nucleares y convencionales del país.

El congreso, aprobado en junio durante una reunión plenaria, aún no ha revelado más detalles, pero se espera que marque un nuevo impulso al programa militar de Pyongyang, reforzando tanto sus armas nucleares como su arsenal tradicional.

El último congreso se celebró en enero de 2021 y presentó un plan armamentístico que incluía satélites espía y misiles intercontinentales de combustible sólido, generando preocupación en la comunidad internacional

Durante la inspección, Kim recibió informes sobre blindajes compuestos, sistemas inteligentes de protección activa para vehículos y defensa contra misiles antitanque.

Además, presenció un concurso de tiro de unidades de francotiradores, donde enfatizó la importancia de entrenar y expandir estas fuerzas especiales.

En los últimos meses, el líder norcoreano ha insistido en la necesidad de reemplazar tanques y blindados por modelos más avanzados, así como en intensificar el adiestramiento militar, tras la movilización de unos 15.000 soldados en apoyo a la guerra de Rusia en Ucrania.

Este anuncio se produce en un contexto de creciente tensión en la península coreana, donde Corea del Sur mantiene superioridad en poderío convencional, mientras la comunidad internacional observa de cerca los avances del programa nuclear norcoreano