GUASAVE, SINALOA.- El olor inconfundible de la birria recién servida se mezcla con la calidez del comal donde se cuecen las tortillas de maíz hechas a mano. Así se vive cada mañana en Birriería Sandoval, un negocio 100% guasavense que ha conquistado paladares por más de tres décadas, bajo la guía de Ranulfo Sandoval, cariñosamente conocido como "El Rano".
Desde 1995, "El Rano" arrancó este proyecto con una visión clara: rescatar el sabor auténtico de la birria de borrego y convertirlo en un referente de la gastronomía local. Hoy, el resultado es un sitio de visita obligada para quienes buscan un desayuno madrugador diferente, lleno de tradición y sazón sinaloense.
En Birriería Sandoval, no solo la birria de borrego es protagonista. Entre los platillos más aclamados están las quesabirrias, crujientes y rebosantes de queso derretido; las gorditas de birria, rellenas de generosidad y sabor; y la popular orden seca, que los clientes piden una y otra vez.
Como si fuera poco, cada visita comienza con un detalle especial: las tortillas hechas a mano, servidas con asientos como entrada, un manjar que prepara el paladar para la experiencia principal.
Ubicada estratégicamente sobre el Bulevar Central, frente al panteón municipal, Birriería Sandoval se ha vuelto parte de la rutina mañanera de cientos de guasavenses que, antes de comenzar su día, hacen una parada para recargar energía con un plato humeante de birria.
Más que un negocio, este lugar es un espacio de convivencia, donde familias, trabajadores y visitantes se encuentran bajo un mismo techo para disfrutar del sazón de casa.
La constancia, el sabor tradicional y el trato cálido son las claves que han mantenido vivo este negocio durante 30 años. Para muchos, visitar Birriería Sandoval no es solo un gusto, sino una tradición familiar que pasa de generación en generación.